NARCOSIS   de NITRÓGENO   ¿QUÉ ES?   ¿QUÉ NO ES??

por  WALLY   BARNES,  

Director de Entrenamiento de SCUBALATINA

Aprendimos en nuestros cursos primarios de buceo lo que era la narcosis del nitrógeno.   Nos la explicaron con algo así como…”una borrachera” que por cada 50’/ 15 m de profundidad equivalía a un martini bien seco sobre un estómago vacío.   Por muchos años se le llamó “el arrebato de las profundidades” (rapture of the deep).  

No solamente este concepto se mantiene vivo en muchos instructores de buceo recreativo,  si no que nos encontramos con supuestos instructores técnicos que aceptan,  creen   y   aun enseñan esta “casi falacia”.   Lo llamo “casi falacia”,  porque a las profundidades de un buzo recreativo (40-130’/12-39 m),   esa borrachera no es de los síntomas comunes,   pero a mucho mayor profundidad,   la narcosis,   que se define en términos médicos como   “anestesia incipiente o principios de anestesia",   se podría interpretar como un arrebato.   Así que la forma de describir la narcosis de nitrógeno a los principiantes como una borrachera,   término que todo el mundo conoce,   está familiarizado   y   posiblemente lo haya sentido,   se puede entender.  

 El problema surge cuando debido a no sentir la “borrachera”,   un buzo piense que NO está bajo los efectos de la narcosis   y   aumente su nivel de riesgo hasta un punto peligroso simplemente esperando sentir los síntomas de su embriaguez.   Otro problema surge cuando instructores “técnicos” transmiten el mismo concepto a buzos que definitivamente van a encontrar principios de anestesia en sus inmersiones.  

 A este nivel,   es necesario el darles los conocimientos que les ayuden a reconocer los síntomas verdaderos y reales de la narcosis para que puedan tomar las medidas necesarias para contrarrestarlas.


La narcosis inducida por los gases inertes,   y prácticamente por TODOS los gases que respiramos tienen un potencial narcótico,   a las profundidades que los buzos recreativos   o   buzos técnicos frecuentan están relacionados con síntomas mucho más tenues   y   por lo tanto,   si no entendemos verdaderamente lo que es la narcosis,   los convierten en mucho más peligrosos.   Así que el mayor problema que confronta un buzo principiante con su conocimiento de narcosis es que está buscando sentir los síntomas equivocados.


¿Qué es la narcosis?   La contestación corta es… no se sabe.   Una contestación más larga es… el resultado del deterioro en el proceso mental,   control neuromuscular y funciones cognitivas de alto orden (pensar,   entender,   analizar).   Los efectos varían en el nivel de una dificultad asimilando hechos (percepción),   lentitud en el pensar,   una reacción,   distorsión del tiempo (análisis),   pérdida de memoria,   ejecución de una reacción (neuromuscular).   Esto hace la narcosis más peligrosa que si bajáramos   y   sintiéramos una borrachera que,   al comenzar el ascenso   y   bajar la presión del nitrógeno,   se nos pasara.


Ya se ha demostrado,   de forma universal   y   sin la más mínima duda,   que la narcosis puede ser medida a cualquier profundidad mayor a 60’/18 m.   Esto se hace a través de ejercicios de coordinación   y   tiempo.   Nadie se escapa de sus tentáculos.   De las señales más claras   y   concretas que tenemos,   la descripción detallada de los que se hizo,   se vio,   o   porque se decidió algo es la que más nos indica las fallas en el sistema nervioso de los buzos.   Nuestra memoria a corto plazo (lo que acaba de pasar) se deteriora   y   se nos dificulta recordar lo que vimos o hicimos.

  Si se pregunta,   ¿cuanta presión tenías cuando llegaste al punto XX?   Nuestra mirada en blanco delata que no nos acordamos.
 

 

¿Cómo lo sentiría un buzo recreativo a unos 100’/30 m usando aire o Nitrox?   Un buen instructor, ya sea recreativo o técnico,   daría ejercicios mentales a sus estudiantes para trabajar mientras bucean.   Los buzos verán con sus propios ojos la cantidad de errores cometidos,  medirían el tiempo que les tomó el completar sus tareas… asumiendo que se acordaron de hacerlas completas.   Los estudios revelan que podemos concentrarnos en una tarea específica   y   llevarla a cabo concienzudamente con errores mínimos.   Sin embargo,   cuando tenemos que realizar varias acciones conjuntas   o   secuentes,   como en una dificultad o emergencia,   nuestro margen de error aumenta desmedidamente.   Ese NO es el momento para darnos cuenta que la narcosis está casi a punto de costarnos la vida.   El error más común es el de no cotejar nuestro gas   o   nuestro consumo.   ¿A qué se debe esto?   A que nuestra función mental del tiempo está distorsionada.   Si tenemos que hacer algo en un momento dado,   se olvida.   Si aprendimos el proceso de computar algo tan sencillo como el consumo de aire por los próximos 15 minutos,   nos sale equivocado,   se nos olvida el proceso,   o   se nos olvida el ejercicio.
¿De qué otra forma nos afectamos?   Imagínense un buzo a 120’/37 m que mira su manómetro   y   lee 500 psig/ 35 bar menos de los que supuestamente debía tener en ese punto de acuerdo con su plan de buceo.   ¿Qué acción puede tomar?   “Sobrios” podemos pensar en varias medidas para compensar la falta de aire.   “Narcotizados”,   nuestras alternativas se estrechan al punto de pensar que no se tiene que hacer nada más que respirar más lentamente para alargar el aire (¿?)   Nota… vemos como esta solución no solamente es errónea,   sino muy peligrosa,   pues expone al buzo a quedarse sin aire a profundidad.   Lo que NO vemos es que respirar más lento nos expone a un aumento en la retención de bióxido de carbono (CO2) lo cual amplifica la narcosis   y   nos aumenta la posibilidad de DCS debido a la acidosis de la sangre.
¿Notaron que el párrafo anterior es una situación de aire o Nitrox?   Es porque mucha gente piensa,  quizás no muy equivocados,   que con menos nitrógeno,   menos narcosis.   Sin embargo,   hay estudios que señalan que el uso del Nitrox nos puede aumentar la retención del CO2 de la sangre.   Esto a su vez amplifica el impacto de la narcosis que,   a pesar de ser más tenue por tener menos presión parcial de nitrógeno,   se siente más fuerte al hacer que los vasos sanguíneos que llevan sangre al cerebro se expandan   y   llegue más nitrógeno a las neuronas cerebrales.   Esté pendiente a otro artículo que publicaremos donde ampliaremos información sobre los efectos del bióxido de carbono (CO2) a profundidad en nuestro cuerpo   y   su letal combinación con otros males como la descompresión (DCS), la Toxicidad del Oxígeno (Ox-Tox)   y   por supuesto,   la narcosis.
Otra leyenda que tienen los buzos que alegan que no sienten la “borrachera”.   Esto simplemente sucede porque están pendientes de sentir eso precisamente.   No se dan cuenta de otros errores,   equivocaciones,   olvidos   o   malas   y   lentas decisiones que hacen mientras “no están narcotizados”.  Esa es la verdadera narcosis,   sus verdaderos síntomas   y   su verdadero peligro.   No es la borrachera que enseñaron en Buceo 101.
Para bajar sobre 80’/24 m,   ¿qué se puede hacer entonces?   Lo más sensato es entrenarse correctamente.   Hay agencias certificadoras que cuentan con cursos que utilizan helio en sus mezclas al nivel de buceo recreativo.   El curso HELITROX entrena buzos para hacer inmersiones hasta 160’/48 m con descompresiones cortas.   Estos cursos son ideales para los buzos recreativos que desean extender sus profundidades   y/o   su tiempo bajo el agua sin entrar en el ámbito del buceo técnico de por sí.   El uso del helio en la mezcla elimina  o   reduce significativamente la narcosis   y   permite al buzo hacer pleno uso de sus facultades a esas profundidades que,   de otra manera,   nos expondrían a riesgos más allá de lo que pensamos.   Una vez se hace una inmersión profunda con mezclas Trimix,   nos damos cuenta de cuan narcotizados hemos estado en buceos con aire   o   Nitrox a esas mismas profundidades   y   nunca aceptamos que lo estuvimos.   Esa es la mejor prueba que un buzo recibe de lo que es la narcosis de nitrógeno… y   lo que no es.